Cintillo Institucional

¿ LA REALIDAD DE NUESTROS VERDADEROS VALORES SOCIALES?

Ponencia de Miguel Ángel Núñez

email: ipiat2000@yahoo.es.

Muy contrario a lo que observamos en los movimientos alternativos emergentes sociales que vienen planteando esa globalizada consigna como lo es “Otro mundo posible". Valores éticos y sociales que pujan por hacerse sentir, tales como: de conocer y respetar la alteridad entre las múltiple culturas; la corresponsabilidad social y la caridad solidaria; el respeto por la vida y sus recursos naturales en especial la tierra y el agua. Estos y otros tantos valores emergen entre nuevos gobiernos latinoamericanos por cuanto coge mucha fuerza la propuesta de la participación. Los gobiernos progresistas que vienen insurgiendo a lo largo y ancho de toda nuestra patria grande, están entendiendo que de la participación popular surgen propuestas de base emergen precisamente de los movimientos sociales. Mas adelante verán algunos ejemplos que vivimos en Venezuela. Yo soy de los que cree en los movimientos sociales, porque considero que en los movimientos sociales está el germen de la nueva gobernabilidad del mundo. De allí si se sabe enfrentar la ideología financista-especulativa. Es esa la ideología que le ofrecemos a nuestras comunidades?, que se la imponemos? que se enseñan y expanden en nuestra Universidades y se permean hacia las sociedades como la nuestra con el gran aliado de internet. En el caso de la quiebra inmobiliaria gringa reciente se daban corporaciones que le exigían a sus empleados asistiesen a talleres, seminarios para explicarles la bondades de los créditos de las cuotas “supreme" eran créditos en donde hipotecaban sus casas solamente pagando los intereses. Los intereses comenzaron a subir, no pudieron pagar los intereses y tuvieron que abandonar las casas, perderlas. Eso trajo precisamente, todo un desbarajuste en los bancos, por la cantidad de exigencia de los bancos y de las casas financiera donde tuvieron que reducir sus índices de inversión. Esta realidad yo la traigo a colación porque el punto no es el problema del hombre nuevo, ni pretender crear un prototipo del hombre nuevo; yo soy de los que creen que el hombre nuevo se va a ir creando, se va a ir formando en el devenir, en las razones de las corresponsabilidades sociales que va ejerciendo con los sentidos y justos compromisos con las comunidades, con el colectivo, de ahí es que va a emerger el hombre nuevo. No hay recetas, el comandante heroico no tenía recetas del hombre nuevo. Y siempre finalizamos nuestras intervenciones diciendo que “el hombre nuevo a salvar, va a liberar la tecnología, nos va a guiar al conocimiento libre", en fin... No hermanos, nosotros tenemos que enfrentar la realidad, entender la realidad del prototipo del hombre nuevo que existe. Enfrentar esta tendencia que hay ahora del “super" optimismo positivo que busca seguir avanzando, pensar en positivo, puro en positivo sin entender el contexto y lo que debemos enfrentar que todavía lo siguen utilizando instituciones financiera quebradas y que lo están discutiendo en universidades norteamericanas, esta gran contradicción que hay y que enfrentamos ahora acá. “La especulación financiera". Porqué una gran reflexión sería: cómo nosotros vamos a sensibilizar a las comunidades, con este prototipo que nos venden; nos imponen, nos han creado de hombre “cool", de hombre “chévere", de hombre “super", y cómo le vamos a negar a las comunidades que exijan eso; fíjense la gran contradicción que nosotros tenemos. Algunos de ustedes me están diciendo que sí, entonces me están entendiendo, está llegando lo que yo les quiero decir, porque eso es parte de la angustia que compartimos ¿el cómo se da esa fuerza que gravita hacia la ideología del mercado; del billete; del $ y del ganar más por ganar a cualquier precio que se aproxime.

En ese sentido, yo creo que no podemos ser mezquinos con nuestro proceso revolucionario que estamos viviendo, independientemente de todas las rabias y miedos que se le tienen al gobierno actual, algo que se está haciendo en Venezuela es que se está promoviendo la sensibilidad de las comunidades. Independientemente de todos los errores y de todas las fallas, de todas las cosas en las que seamos lo más crítico posible, hay un esfuerzo por responsabilizar a las personas y responsabilizar a las comunidades. Y no seamos mezquinos, no seamos egoístas con nosotros mismos, valoremos qué es lo bueno que hay allí. Yo creo que por allí comienza la primera propuesta de sensibilización de la comunidad, darle participación y responsabilidad a las comunidades, porque a través de la corresponsabilidad (atención, estoy hablando de corresponsabilidad social, que es distinto a lo que es compromiso y a lo que es obligación, son tres cosas distintas que se valoran en distintos momentos) a través de la corresponsabilidad participativa voy adquiriendo seguridad, voy adquiriendo confianza, estima. Es algo que se prendió en Venezuela, como se prendieron en los consejos comunales la planificación participativa, la contraloría social, los presupuestos participativos, propuestas que han venido de los movimientos emergentes sociales. Afirmo esto no lo han tenido las sociedades revolucionarias y no lo tenían las sociedades comunistas. En Cuba con todo el respeto que se merece nunca tuvo una planificación participativa, ni tampoco una contraloría social, ni mucho menos bancos comunales. Eso son espacios de sencibilización. Ahora, y eso tenemos que reconocerlo en la mejor lid, fíjense cómo este proceso venezolano, de una u otra manera ha tenido espacios de influencia en otras sociedades para el proceso de emancipación de los pueblos, porque la realidad latinoamericana es sumamente compleja. Fíjense cómo están prendidos los países latinoamericanos a la razón de las constituciones, cómo viene a valorarse, a entenderse con todas las fallas, con todos los problemas que podamos tener, con todas las metástasis que podamos mantener de la cleptocracia de la Cuarta República, aquí en nuestra Venezuela hay algo andado. Entonces no seamos mezquinos, no neguemos esa realidad. No permitamos que lo medios de comunicación nos sigan manipulando con el ritmo “la rabia, el miedo, el miedo la rabia", eso no puede ser, tenemos que tener criterio, tenemos que tener razón de ser, y tenemos que ser suficientemente objetivos como para poder tener estos conocimientos y habilidades para defender nuestro proceso.