#acl +amarcos:revert +jcontreras:revert Default '''GESTIÓN DE GOBIERNO, EJERCICIO DEL PODER POPULAR Y CONOCIMIENTO LIBRE ''' '''''Hacia la concreción del Primer Plan Socialista de la Nación 2007-2013'' ''' '''Fundación CENDITEL ''' '''Marzo de 2008 (nueva version)''' [[attachment:Bajar Documento]] “¿Dónde iremos a buscar modelos? la América Española es original. Originales han de ser sus instituciones y su gobierno. Y originales los medios de fundar otras. O Inventamos o Erramos...” “La América no debe imitar servilmente, sino ser original.” Simón Rodríguez “Usted formó mi corazón para la libertad, para la justicia, para lo grande, para lo hermoso. Yo he seguido el sendero que usted me señaló” Simón Bolívar “... La causa que sostenemos, que no es otra que la verdadera causa de los pueblos, la república genuina, la federación, vuestro heroísmo, debe ser premiado con el triunfo de los principios y el derrocamiento consiguiente de la tiranía. ¡ Viva y para siempre la memoria de los patriotas de nuestra independencia, de los hombres del 05 de Julio de 1811, los que en el acta gloriosa dijeron a los pueblos: ¡ . FEDERACIÓN !... Que se cumpla, pues, después de tantos años...” Ezequiel Zamora Tabla de Contenido Pag. I Introducción 4 II Temas para la Reflexión 6 II.I El papel del Conocimiento Libre en las Ciencias Sociales 6 II.II El papel de la Tecnología en la construcción del Socialismo 7 III Primer aporte para la discusión 9 De cara al PPS - Proyecto Nacional Simón Bolívar 9 III.I Principios necesarios para el ejercicio del poder popular socialista 11 Propuesta Estratégica 12 III.II Sistema de reflexión y seguimiento popular 12 III.III Medios para la participación protagónica en la Gestión de Gobierno 24 III.IV Espacios para relaciones heterárquicas sociales 28 IV Propuesta Piloto 35 IV.I Espacios de Poder Popular 35 IV.II Relaciones Socioproductivas 39 IV.III Corporación de Desarrollo Regional 44 V Aspectos de Concreción 47 V.I Impacto 47 V.II Viabilidad 49 V.III Primeros Pasos 52 I. Introducción . La Venezuela del siglo XX -especialmente en su segunda mitad- vivió un proceso incesante y profundo de enajenación del bien público. En un nivel superficial, el proceso de enajenación del bien público lo vivimos a través de la constante transferencia del petróleo como fuente de riqueza pública para la nación venezolana. Una ínfima porción de la población -que nunca superó el 20%- se hizo de más del 50% de los ingresos petroleros. En contraste, el 20% más pobre nunca logró recibir más del 6% de los ingresos nacionales1. Sin embargo, nótese, este proceso de enajenación logró llevarse a cabo no sólo a través de medios ilegales, más bien, en su gran mayoría la enajenación tuvo lugar mediante medios perfectamente legales. ¿Cómo fue ello posible? Mediante una estructura compleja, en la que se utilizó un discurso que resaltaba la inversión del petróleo como fuente de riqueza para financiar el desarrollo del país pero que enmascaraba, a fin de cuentas, un proceso de enriquecimiento de unos pocos en desmedro de la gran mayoría2. Ahora bien, en un nivel más de fondo, la enajenación del bien público no sólo posibilitó el secuestro del petróleo. En su nivel más profundo y de mayor peligro, la enajenación del bien público debilitó las raíces culturales del pueblo venezolano y nos excluyó, no sólo de los beneficios económicos de la riqueza petrolera sino también, de la posibilidad de constituir, y constituirnos en, el cultivo de la venezolanidad como el bien cultural supremo3 que nos reúne en nación. Tras el uso despectivo de palabras como “popular”, “pueblo”, “cultura popular”, “folclore”, y hasta “venezolano”, fuimos siendo marginados a espacios en que “ser culto” significaba nutrirse de la cultura del Norte exclusivamente. Por ello nos creímos el cuento ese de que éramos “subdesarrollados” y que nos desarrollaríamos el día que llegásemos a ser como ellos, los norteños, los colonizadores... Los que no son como somos. En las dos últimas décadas, el pueblo venezolano ha estado golpeando las estructuras que formalizaban este proceso de enajenación, al que se ha dado en llamar el puntofijismo. Al menos desde el 27 de febrero de 1989 se hizo evidente que el pueblo se encontraba en estado de resistencia y que la misma podría llegar a ser violenta de ser necesario. Los eventos de la década de los noventa y que culminaron, primero, con la elección del Comandante Hugo Chávez Frías como Presidente de la República y, segundo, con el llamado a la Asamblea Constituyente y la promulgación de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela de 1999 (CRBV) demostraron que se había comenzado un claro proceso de refundación nacional. El presente documento tiene por finalidad, en primer lugar, desvelar algunos de los supuestos sobre los que se busca basar el quehacer del Centro Nacional de Desarrollo en Tecnologías Libres. Con ello podremos entonces, en segundo lugar, presentar unas pinceladas de los proyectos que estamos presentando como propuestas de investigación y desarrollo en función del proyecto nacional de la Venezuela Socialista del Siglo XXI. De cierta forma resuena aquí Robinson con su llamado a la originalidad, más vigente que nunca: ¡¡O Inventamos o Erramos!! II.Hacia la Fundamentación de la Tecnología Libre . ¿Qué es eso que estamos llamando Tecnología Libre? Es necesario comenzar por acercarnos a entender el sentido de la expresión “tecnología libre” para comprender el quehacer cenditelista. En primer lugar, debemos aclarar que por Tecnología Libre no nos referimos necesaria y exclusivamente a software o hardware libre. Como bien lo expresa León (2008), éstas libertades que se aislan de lo social “no son suficientes para exponer las bondades del Software Libre en la construcción de un nuevo Socialismo”4. Debemos entonces encaminarnos a pensar el tema de la libertad tecnológica en el marco de la Venezuela del Siglo XXI. II. I ¿Tecnología Libre? . El punto de partida para una tecnología liberadora es que ella no es “neutra”5. El conocimiento tiene sentido solo en una cultura y, en consecuencia, se establece de manera histórica, social y política. Ello no significa, sin embargo, que se establezca arbitrariamente. Precisamente todo lo contrario, la arbitrariedad de la supuesta “neutralidad” del conocimiento ha sustentado procesos de dominación política en los que hemos sido sometidos, por ejemplo, a un supuesto “subdesarrollo congénito”. Con ello se han posibilitado que aceptemos acríticamente relaciones de dominación que nos empobrecen como nación mientras enriquecen a los países que se han autodenominado “desarrollados”... congénitamente. Dado lo anterior se entiende que Cenditel debe acercarse de manera crítica a la tecnología. Cuando hablamos de “crítica” no nos referimos -al menos exclusivamente- a “la censura” de lo tecnológico. Nos referimos a la mirada reflexiva que procura develar los supuestos que, de manera oculta, sustentan lo tecnológico. Cuando preguntamos por el sustento de lo tecnológico nos encontramos con dos aproximaciones. En una primera, encontramos que lo tecnológico se encuentra ligado a lo instrumental. Lo tecnológico indaga por los medios más efectivos y eficientes para alcanzar fines dados. El interés de lo instrumental yace en la “optimización” de los medios, no en los fines. Por otro lado, nos encontramos con el discurso del “desarrollo”, dominante desde finales de los años cincuenta del Siglo XX. De sopetón, los países se dividieron en desarrollados y subdesarrollados. Los segundos debían seguir a los primeros y para ello debían importar sus tecnologías, sus modos de organización social, a fines de industrializar su economía y alcanzar el “desarrollo” Nótese que al reunir el instrumentalismo con el desarrollismo caemos en una carrera incesante por copiar medios sin cuestionar el fin (el cual ya venía dado y que era incuestionado). El fin era ser como eran los países desarrollados. La pregunta por los fines -es decir, la que pregunta por lo qué queremos ser- dejó de ser pertinente. Lo único válido era la pregunta por qué medios copiar, y en el mejor de los casos, cómo mejorar esos medios, siguiendo un supuesto modelo único de sociedad posible a nivel mundial. Una Tecnología Libre debe entonces lidiar por trascender más allá del instrumentalismo y el desarrollismo. Para ello es necesario colocar en la arena de discusión la pregunta por los fines, también conocida como la pregunta por el sentido de los sistemas. Pero otro aspecto fundamental de la Tecnología Libre debe ser su característica liberadora. ¿Liberadora de qué? liberadora en el sentido de permitir tomar conciencia de cómo ella nos condiciona y nos hace posible como seres, devolviéndonos la autonomía del pensamiento y de la toma de decisiones. Así, una tecnología será libre (ya sea en sus modos sociales o físicos) en la medida en que podamos descubrir las condiciones que la hacen posible y nos hacen posible, lo que permitirá el surgimiento de la racionalidad necesaria para democratizar la técnica. He aquí el tema que, traspasando la Tecnología Libre, hace trascendental al Conocimiento Libre. Buscamos nutrirnos de pensadores como Humberto Maturana, Francisco Varela y Niklas Luhmannhan en su desarrollo de conceptos como la autoregulación y el equilibrio que buscan los sistemas autopoiéticos en sano estado6. Los sistemas autopoiéticos son aquellos que tienen la posibilidad de autoregenerarse a partir de sí mismos. Esta cualidad es característica de las culturas en buen estado, las cuales se van recreando a sí mismas a medida que se van desplegando en su devenir. Cuando una cultura pierde su capacidad autopoiética, ella se destina a desaparecer. Cuando las necesidades y problemas no surgen de la propia cultura, sino que son transplantadas de culturas foráneas dominantes es síntoma de perdida de la capacidad autopoiética. . Asimismo, pensadores como Steven Jhonson, Eric Bonabeau y Pierre Levy han propuestos conceptos de auto-organización y realimentación para modelar la dinámica de los sistemas emergentes7. Particularmente, estos modelos buscan comprender los fenómenos que, a partir de la interacción de entidades simples, producen comportamientos complejos que no pueden explicarse a partir de las singularidades de dichas entidades. Por ejemplo, ¿Cómo podemos dar cuenta de ese pueblo venezolano que parece moverse por cuenta propia, coordinada y con sentido, tal y como lo vimos claramente en fechas memorables como el 13 de abril de 2002 y durante el Caracazo? Por último, en consonancia con las ideas de Ramsés Fuenmayor y la Sistemología Interpretativa vemos la problemática del Pensamiento de Sistemas como una búsqueda de sentido8. Más allá de la emergencia como concepto, el “sentido” se muestra como la totalidad con la que se presentan los fenómenos. Tendríamos que pensar cómo se enriquece el sentido de la problemática actual en la reflexión sobre una sociedad sensibilizada en su situación histórica y en la problematización sobre el tema del conocimiento. Ello nos lleva a reflexionar en torno a las fundamentaciones de nuestra cultura actual nutriéndonos para esto de pensadores latinoaméricanos y de otras latitudes como Oscar Varsavsky, Martin Heidegger y Andrew Feenberg. Finalmente, entendemos que el conocimiento debe ser liberador para ese hombre nuevo constitutivo y constituyente del Socialismo del siglo XXI. Un hombre consciente de la dinámica social en la que esta inmerso, que tenga como base de su quehacer los valores superiores de: “la vida, la libertad, la justicia, la igualdad, la solidaridad, la democracia y la responsabilidad social...” al que se refiere el articulo 2 de nuestra Constitución; todo inspirado en la consideración suprema del ser humano “como sujeto activo de todo proceso de desarrollo” ( Artículos 3 y 79 C.R.B.V), reconociendo así a los diferentes actores sociales. En menos palabras, un individuo que ejerza su ciudadanía -que se reconozca en sociedad-por y para el beneficio colectivo. II.II La Tecnología Libre en la construcción del Socialismo . El proceso imperial de desarraigo que ha tenido lugar en las últimas décadas ha tenido como principal fenómeno lo que en las últimas décadas se ha llamado la globalización. La globalización ha sido un proceso caracterizado por una homogeneización mundial alrededor de una sociedad de mercado. Se trata de implantar en todas las sociedades del planeta las “éxitosas” sociedades de mercado del Norte. De esta manera, la globalización corona a nivel mundial el desarrollismo consumidor y el instrumentalismo acrítico. En uno de sus últimos avances la globalización ha creado estrategias que buscan privatizar el conocimiento. Se trata de esta manera de entrampar a las sociedades del mundo a través de mecanismos legales que les exigen dejar de pensar para entrar en relaciones de dominación en las que comprarían el conocimiento-producto ofrecido por el proveedor imperialista. Se entiende aquí que la construcción de una sociedad socialista, nacional y creativa (en un sentido similar al de (Varsavsky, 1972)9) amerita de plantear la lucha no sólo por hacer público los medios de producción sino por desprivatizar el conocimiento. Ahora bien, para ello debe promoverse: “[la creación de] consciencia, hacer socialmente responsable, reflexivo y crítico, al individuo que trabaja y hace Conocimiento, Ciencia y Tecnología en Latinoamérica. Este individuo debe ser capaz incluso de buscar criterios de verdad propios de acuerdo a nuestra realidad” (p. 33)10 . Esta tarea sólo es posible a través de un aprendizaje colectivo y de la creación y generación de un conocimiento de carácter público que se enfile hacia el enriquecimiento de nuestra sociedad y nuestra cultura. Para ello es necesario fomentar prácticas sociales en las que se fomente la reciprocidad, la solidaridad, la equidad y la justicia en relación a fines sociales apropiados a la cultura en que se enraíza. Es necesario, pues, un profundo proceso de reflexión en torno a nuestro devenir como nación, nuestros quehaceres más propios, nuestras querencias como sociedad y los medios más apropiados para alcanzar dichas querencias. Por todo lo antes mencionado, consideramos que la conciencia política en relación a la tecnología y al conocimiento, son elementos vitales en los espacios para la construcción en comunidad de los fines esenciales del estado Venezolano, tales como: “El desarrollo de la persona, el respeto a su dignidad, el ejercicio democrático de la voluntad popular, la construcción de una sociedad justa y amante de la paz, la promoción de la prosperidad y bienestar del pueblo ...” (Art. 3 C.R.B.V). En esta dirección re-aparece la siguiente pregunta: ¿Cuáles son las técnicas y tecnologías apropiadas a nuestra cultura que permiten desplegar nuestro ser liberado de la hegemonía neoliberal? III. Primer aporte para la discusión De cara al PPS - Proyecto Nacional Simón Bolívar . Ya lo hemos dicho, el conocimiento libre se libera de la supuesta “neutralidad”, el conocimiento libre se contextualiza en la cultura y en el devenir sociopolítico, a partir de los cuales un proyecto común adquiere sentido. En este orden de ideas, la propuesta presentada ha sido contextualizada en el proyecto de la Venezuela Socialista del Siglo XXI, y expresado en el Primer Plan Socialista (PPS) de la Nación, también llamado, “Proyecto Nacional Simón Bolívar 2007-2013”. El PPS se orienta por las siguientes directrices: Nueva Ética Socialista La Suprema Felicidad Social Democracia Protagónica Revolucionaria Modelo Productivo Socialista Nueva Geopolítica Nacional Venezuela: Potencia Energética Mundial Nueva Geopolítica Internacional . Refundar la nación Venezolana; potenciar el poder popular mediante la praxis protagónica del hombre social; desmontar las estructuras jerárquicas de relación humana imperantes; reenfocar la acción geopolítica hacia un orden liberador del poder productivo concentrado, y construir polos de potencia social creadora que apunten a la renovación de la condición humana, constituyen los retos del PPS. Todo ello debe llevar al ejercicio del poder popular como forma de gestión de gobierno. En base a este proyecto nacional y socialista, presentamos un aporte para trabajo conjunto que procura situarse en el marco de las relaciones e interacciones sociales: Redes organizacionales que procuren fortalecer el ejercicio del poder popular, promoviendo relaciones de tipo heterárquico (en relación de antónimo a las “relaciones jerárquicas”), en base a un Sistema Comunitario de Conocimiento que incorpore espacios para la reflexión, seguimiento y toma de decisión. En primer lugar, es necesario destacar que las propuestas que se están presentando desde CENDITEL procuran empoderar al pueblo mediante modos de organización que sustituyan el modelo de dominación jerárquica. Se trata de reconstruir en conjunto la comunidad derruida, tras décadas de implantación de modelos capitalistas en sus versiones neoliberal, desarrollista y/o neo-colonialista. Tal y como se establece en el PPS: “Dado que la soberanía reside en el pueblo, este puede por sí mismo dirigir el Estado, sin necesidad de delegar su soberanía, tal como en la práctica sucede con la democracia representativa o indirecta, esta dirección del Estado está indisolublemente unida a la búsqueda del bien común, y no como en la democracia representativa en la que, bajo la argucia de la libertad individual, con el camuflaje de la 'igualdad de oportunidades' y el acicate de la competitividad, se legitima el interés de grupos minoritarios contrapuestos al interés general de la sociedad.” 11(p. 14) . En este orden de ideas estamos proponiendo un modelo de organización pública que, basada en las potencialidades que podemos desplegar a partir de la tecnología y el conocimiento libre, coadyuve al fortalecimiento del poder popular en función de la democracia protagónica revolucionaria expresada en el PPS. Este tipo de organización rompe con el paradigma de la burocracia del Siglo XX. Irrumpe contra la idea de “poder” situado en el escritorio. Rompe con la decisión que se toma en el ministerio, en la alcaldía, en el instituto. Procura, sí, la decisión en la comunidad; la articulación entre las distintas instancias de poder público; la interacción entre iguales que promueva la cooperación; la subordinación de la organización pública al poder del pueblo; y, una ética de servicio en el servidor público. Se hace necesario construir herramientas de empoderamiento del pueblo. La dinámica de Reflexión y Seguimiento Popular procura generar espacios de reflexión que posibiliten el entendimiento, la comprensión y la construcción de conciencia necesarios para el aprendizaje en la toma popular de decisiones. Son espacios que se encontrarán replicados en diversas instancias como los consejos comunales, las comunas, las organizaciones gubernamentales, las empresas públicas y otro tipo de organizaciones comunitarias. La generación, estructuración e interpretación de la información de manera compartida a los diversos niveles, comunal, local, regional, nacional e, incluso, internacional, será la clave del éxito del Sistema de Reflexión y Seguimiento Popular. Para ello se propone un modo de relaciones sociales heterárquicas en la cual se promueva la cooperación y la solidaridad a través de sistemas que permiten compartir experiencias, información y conocimiento, así como también formas de valoración que promuevan la participación cooperativa y la excelencia en la práctica. Nótese que se trata de un espacio de construcción colectiva, y sin jerarquías, dirigido a la co-gestión en la satisfacción de las necesidades sociales y la generación de conciencia colectiva. Estas propuestas apunta a abonar en la construcción de un modelo productivo socialista que promueva la eliminación de la división y la explotación del trabajo, que genere el conocimiento y la tecnología necesarias para atender nuestras problemáticas, y que coadyuve a la soberanía nacional en el cultivo de la cultura que nos reúne en nación en función de la construcción del Socialismo del Siglo XXI en Venezuela. Puede entreverse aquí que, en el quehacer cotidiano -definido en términos de estar en liberación de la lógica capitalista-, se está constituyendo el hombre nuevo esbozado en la ética socialista. Asimismo, desde ese quehacer cotidiano se puede ir rompiendo con las estructuras de explotación capitalista, y en dicho proceso ir posibilitando la construcción de una sociedad que procura la Suprema Felicidad Social a partir de la profundización de la democracia revolucionaria. III.I. Principios necesarios para el ejercicio del poder popular socialista . Cinco principios consideramos vitales en los proyectos desarrollados por Cenditel. Estos principios son: 1.Promover en todo momento la Democracia Participativa y Protagónica Revolucionaria: Para la construcción de la sociedad democrática, participativa y protagónica, multiétnica y pluricultural organizada en un Estado cuyo fin esencial sea el “la defensa y el desarrollo de la persona y el respeto a su dignidad, el ejercicio democrático de la voluntad popular, la construcción de una sociedad justa y amante de la paz, la promoción de la prosperidad y bienestar del pueblo y la garantía del cumplimiento de los principios, derechos y deberes reconocidos y consagrados en esta Constitución” (Artículo 3, CRBV) tal y como está establecido en nuestra Constitución Bolivariana. 2.Cultivar la Auto-Organización Social: Un pueblo consciente de su rol social, es un pueblo que se auto-organiza y determina, a partir de su historia, su proyecto. Un pueblo que ejerza la democracia protagónica y participativa no espera dádivas de un estado paternalista, sino que toma el timón de su destino colectivo. 3.Desplegar el Desarrollo Endógeno Sustentable: Desarrollo que se entiende como el “despliegue del quehacer social en armonía con su entorno” (p. 14)12. Se trata de un desarrollo que, enraizado en el sedimento cultural del que provenimos, se proyecta hacia la refundación nacional en el cultivo de la endogeneidad de la patria socialista. Para ello, se hace imprescindible pensar el Desarrollo Endógeno a la luz de cuatro dimensiones que permitirán darle un piso de sustento13. La primera dimensión es el arraigo local, el cual tiene que ver con el conocimiento, las vocaciones, y las capacidades de una comunidad, las prácticas culturales y sociales que existen en dicha comunidad, así como las potencialidades de su entorno. La segunda dimensión tiene que ver con los procesos de decisión local, los cuales se deben basar en espacios de diálogo y concertación, construidos local y colectivamente, por los ciudadanos, las organizaciones públicas y sociales, entre otras, que hacen vida en esa localidad. La dimensión de control local tiene que ver con el control sobre las decisiones, lo que permite el ejercicio de la ciudadanía de forma responsable y protagónica, garantizando que lo que se ha construido colectivamente como bien público (proyecto de vida comunitario) se realice. Finalmente, la dimensión de enriquecimiento local debe ser observable en todos los contextos (espiritual, físico, cognitivo, etc.) en el que el quehacer social comunitario se despliegue. 4.Entender, Comprender y Socializar el Conocimiento en Vigilia Contralora: Pueblo consciente que entiende y se comprende en su contexto histórico y sociopolítico, para desde allí generar, estructurar y usar el conocimiento en la vigilia permanente en torno al cultivo de su cultura en el sostenimiento del rumbo político nacional. 5.Cultivar las virtudes de la Crítica, el Trabajo Colaborativo, la Solidaridad y la búsqueda de la Excelencia: Valores que se entienden como cualidades que se cultivan en la práctica de ir construyéndonos, en función de la ética socialista, para ir esculpiendo al hombre nuevo de la Venezuela del Siglo XXI. . En función de lo anterior adelantamos un primer esbozo de nuestra propuesta estratégica. III.II. Sistema de Reflexión y Seguimiento Popular . La transformación institucional del Estado Venezolano en un organismo integrado que responda a la problemática social del pueblo soberano, pasa por la transformación de la conciencia ciudadana sobre su rol político, y la construcción del entendimiento sobre el contexto histórico-social de su entorno, apuntando hacia el objetivo primario de enriquecer nuestra cultura. La dinámica institucional, y aún la comunitaria, suele carecer de espacios pensados para lograr tal construcción. Así, actualmente, el Servidor Público, divorciado de su rol ciudadano, actúa respondiendo los requerimientos de un pueblo que, en muchos sentidos, le es ajeno. De manera similar, el ciudadano, en muchos lugares, carece de la visión necesaria para reconocerse en su par y vivir en comunidad en su lucha colectiva por el bienestar común. La posibilidad de articular el rol de servidor público en función del cultivo de la ciudadanía en una dinámica participativa y cooperativa de gestión de gobierno14, que transforme el modo actual de hacer gestión de gobierno en función de la pertinencia, permitirá, además, brindar seguimiento a las decisiones y acciones que se puedan tomarse para atender una situación social específica, posibilitando así la contraloría social. Objetivos . El Sistema de Reflexión y Seguimiento Popular es una propuesta que busca promover la creación de espacios para la transformación cívica e institucional, mediante la generación de entendimiento sobre el entorno social, político, económico, ecológico, tecnológico e histórico, que acompañe y dé coherencia a la gestión pública de situaciones sociales específicas en la búsqueda del bien común. Con ello se persigue contribuir a: Articular la gestión pública con el proyecto nacional de desarrollo social. Colectivizar los procesos de toma de decisiones de impacto social. Socializar el conocimiento estructurado que se utiliza en la solución de situaciones sociales específicas. Formar al ciudadano-vecino y al ciudadano-servidor público en una dinámica participativa y corresponsable de práctica de gobierno. Posibilitar el sentido profundo de hacer contraloría social: Conducción ciudadana de las transformaciones sociales Viabilizar la transformación institucional al servicio del poder constituyente Ser una herramienta cultural para la gestión de emergencias y conflictos sociales Procesos componentes . El Sistema de Reflexión y Seguimiento Popular se articula en dos dinámicas, que proveen entendimiento como resultado de un proceso de reflexión sobre conocimiento libre estructurado, a saber: Reflexión Situacional y Observación para la Reflexión. Estas dinámicas se ubican principalmente en la generación de propuestas y la acción participativa para responder a situaciones sociales específicas, a partir de un entendimiento de la misma -conocimiento con sentido holístico. Este entendimiento se logra a través de procesos de observación -vigilancia y alerta- y reflexión sobre conocimiento estructurado (sistematizado) o no. Todo ello se enmarca dentro del espíritu de la participación ciudadana corresponsable en la gestión pública. El sistema prevé la socialización de este conocimiento estructurado, más allá del ámbito de gestión de gobierno de la organización, de tal forma que se potencie el entendimiento de dicha gestión en la sociedad y se posibilite una forma madura de Contraloría Social. Dinámica para la Reflexión Situacional . La propuesta de Dinámica para la Reflexión Situacional nace de la reflexión sobre el tema de Salas Situacionales -SS-. La experiencia sobre SS puede remontarse desde el comienzo de la gestión de gobierno nacional actual. La naturaleza militar, en la formación de muchos de los funcionarios públicos al frente de las instituciones y organismos del Estado, ha dirigido la toma de decisiones a este tipo de espacios altamente sistematizados y jerarquizados. Sin embargo, la percepción generalizada sobre estos espacios es que carecen de continuidad, y de transparencia suficiente, para permitir la participación amplia y protagónica de las mayorías, en aquella toma de decisiones. Se tiene la percepción de que se trata de espacios de élites políticas, que responden a situaciones coyunturales de índole político o de gestión de emergencias. En la actualidad, impera en las estructuras del Estado el modelo de Sala Social Situacional, que apunta a la sistematización rígida de procesos de gestión de información, enfocándose excesivamente en aspectos teóricos difíciles de socializar y generando espacios de concentración de toma de decisiones en pocas manos. En nuestras reflexiones sobre el tema de la SS, emergieron algunas consideraciones respecto a la posibilidad de concretizar, o de hacer viable, un recurso como ese en entornos distintos en su organización y su praxis, como lo serían los Consejos Comunales, Instituciones y Organismos del Estado, y las Organizaciones Políticas. Tales consideraciones abordan los temas de la formación técnica y el sentido político que una herramienta como la SS requeriría para su utilización en los procesos de toma de decisiones. Estamos hablando entonces, de una propuesta que resulte rápidamente aprehensible, que pueda ensayarse en casi cualquier espacio en el que se requiera hacer gestión de gobierno de manera reflexiva y coherente -sistémica- que posibilite tomar decisiones de raíz colectiva. Además, debe prever mecanismos de maduración que conduzcan, ulterior y probablemente, a una propuesta emergente, revisada, un estadio mejorado -¿más capaz? ¿virtuoso?-, en el que la tecnología actuaría como herramienta para potenciar capacidades. Objetivos de la Dinámica para la Reflexión Situacional. . El objetivo de la Reflexión Situacional es generar entendimiento para la toma de decisiones y socializar continuamente el conocimiento utilizado para lograr el mismo. De acuerdo al ámbito en el que se concreten los Principios de Reflexión Situacional, este objetivo mayor puede cambiar para cumplir con una meta organizacional, a saber: 1.Reflexión Situacional Comunitaria. Se circunscribe al ambiente comunitario o comunal. Su objetivo es generar entendimiento para la autogestión y socializar continuamente el conocimiento sobre la problemática social y del bienestar a buscar, propiciando la contraloría social y produciendo proyectos para el bien común, que puedan realizarse por sí mismos o con la participación de otros entes tales como instituciones y organismos del Estado. 2.Reflexión Situacional Institucional. Su ámbito refleja la actitud y accionar del servidor público. Su objetivo principal es generar entendimiento para la toma de decisiones de carácter corresponsable entre las comunidades y el Estado, socializando continuamente el conocimiento necesario para la formación del ciudadano y la contraloría social. 3.Reflexión Situacional en la Organización Política. Su objetivo es generar el entendimiento de la problemática social para alimentar la formulación de un plan de acciones de gobierno promovidas desde la organización política, socializando el conocimiento necesario para dicha formulación entre sus cuadros. Puede también contribuir al logro de otros objetivos de la organización. Roles en la Dinámica para la Reflexión Situacional. 1.Rol del ciudadano. Cada miembro de una comunidad, en la medida en que experimente su rol ciudadano corresponsable por el devenir de su comunidad, podrá participar de manera pertinente. Es entonces, un ciudadano que se reconoce como parte de un colectivo y conoce el ambiente comunitario propio de su localidad y organización. Su conocimiento sobre este ambiente permite validar datos e información que puedan provenir del mismo. 2.Rol del servidor público. El servidor público, alimentado por el entendimiento promovido desde la Reflexión Situacional, podrá ejercer su función de manera eficiente y corresponsable, canalizando tanto las propuestas en el proceso de gestión de gobierno de su institución, como aquellas en las que pueda participar en un ámbito fuera de ella. Su acción en el ambiente no sólo tiene el componente corresponsable del ciudadano, sino que puede y debe articular la acción institucional del Estado para la resolución de situaciones mediante procesos de toma de decisiones pertinentes. 3.Rol del director. El carácter jerárquico en la organización de las Instituciones y organismos del Estado le confieren a los cargos directivos la última instancia en los procesos de toma de decisiones. Sin embargo, la corresponsabilidad entendida como la posible y deseable participación y protagonismo del Poder Popular en estos procesos, minimiza el rol del director hacia el del ejecutor –o instanciador ejecutivo- de decisiones colectivas. De allí, la importancia que el entendimiento, necesario para esta ejecución de acciones, sea construido en colectivo. El Sistema de Reflexión y Seguimiento Popular promueve la colectivización del rol del director. . Visualizamos que la Dinámica para la Reflexión Situacional puede basarse en procesos iterativos llamados momentos: momentos para observar, momentos para analizar, momentos para reflexionar, momentos para socializar y momentos para decidir. La realimentación de la dinámica de momentos, permitirá ir estructurando conocimiento para promover el entendimiento de la problemática social que se esté analizando, mediante procesos de reflexión. 1.Momentos para observar: Son los momentos para desarrollar los procesos de recolección de datos e información. Muchos de estos harán uso de los recursos disponibles en la dinámica de Observación para la Reflexión. Reconocer el espacio colectivo propio de un ámbito particular, y que diversos actores se reconozcan como parte de él, permitirá organizar funcionalmente el conocimiento de ese ámbito, hacerlo pertinente. Este momento supone un primer nivel de conocimiento, podríamos decir superficial, del ámbito estudiado. 2.Momentos para analizar/procesar: Es la etapa en la que se procesan los datos e informaciones recolectadas y se busca generar conocimiento estructurado, es decir más profundo sobre la problemática que se analiza. Este conocimiento se utiliza luego en los momentos de reflexión. 3.Momentos para reflexionar: Es el espacio para la construcción del entendimiento. Está ligado indisolublemente a la experiencia y a la posibilidad de participar en reflexiones colectivas que permiten complementar las diversas valoraciones subjetivas que pueden hacerse en colectivo. Ese aspecto subjetivo de los juicios propios del entendimiento, es el que se verá así enriquecido mediante este proceso de maduración. Es también el espacio para la formación. Las discusiones, diagnósticos y decisiones colectivas permitirán enraizar el entendimiento. Finalmente, es el espacio en el que se pueden producir propuestas para la toma de decisiones. 4.Momentos para socializar: Visualizamos estos momentos como los vehículos para el entendimiento. El conocimiento sobre una problemática social particular se acompaña de elementos de socialización para alcanzar el entendimiento. Esto es, que el conocimiento tome formas de contenido fácilmente divulgables, como escenarios con alternativas, infografías, documentos distribuibles, etc. Es el momento en el que se busca que se logre el entendimiento colectivo, y que en consecuencia, se potencie por un lado, la gestión pertinente y transparente de la problemática pública, y por el otro, la posibilidad de hacer seguimiento y contraloría social de la misma. 5.Momentos para decidir: La Reflexión Situacional habrá producido propuestas para la toma de decisiones y la construcción de las estrategias de acción. Dinámica de Observación para la Reflexión . Toda vez que, para la toma responsable de decisiones se requiere una reflexión de las alternativas e implicaciones de lo decidido, es menester contar con conocimiento -lo más exhaustivo posible- de todo lo concerniente a la situación concreta en su contexto. Generalmente, en una sociedad, existen personas y comunidades con experiencias e información suficiente para el fin planteado anteriormente; pero, al no ser oportunamente apropiadas por otros colectivos, permanecen aisladas de manera temática y espacial. La instauración de una red de conocimiento social compartido es el sentido de la dinámica de Observación para la Reflexión. Objetivos de la Dinámica de Observación para la Reflexión. . El objetivo de la Observación para la reflexión, es hacer accesible -a quienes lo requieran- el conocimiento pertinente, oportuno y fidedigno, que permita la escogencia y libre apropiación de información (entre la vastedad de conocimientos repartidos en la sociedad) para la toma de decisiones reflexivas, y ulteriores acciones, que articulen múltiples actores sociales en el contexto del empoderamiento popular para el gobierno compartido. Con ello se persigue: Ubicar fuentes específicas de conocimiento (documentadas y no documentadas), entre los distintos actores sociales de la red, susceptibles de proveer información sobre: experiencias, necesidades, oportunidades, amenazas. Identificar necesidades generales de conocimiento, y específicas de cada actor. Recabar y almacenar información pertinente. Difundir; mediante divulgación general y/o noticia a actores específicos, conocimiento pertinente, o la forma de apropiación directa de la fuente (si no estuviera documentada). Vincular directamente actores de la red. Ampliar la red de conocimiento. . El sistema de observación está concebido como una red de conocimiento organizada; compuesta por individuos y colectivos (institucionales o no), los cuales constituyen nodos de saber en la red. El conocimiento está contenido principalmente en la forma del “saber” de cada individuo, y puede ser documentable o no. Cada nodo cuenta con bases documentales y protocolos de interacción que aseguran la comunicación con el resto de la red. Finalmente, todo se articula mediante un entramado de vínculos dinámicos, los cuales son formados, fortalecidos o debilitados, -emergentemente- por la misma actividad de la red. Los vínculos pueden ser descritos como: . 1 Vínculos físicos: lugares de coincidencia comunicacional: 1.1 Coincidencia instantánea; por ejemplo: lugares de reunión, salas de conferencia, radios comunitarias, televisión comunitaria, contacto telefónico, teleconferencias, etc. 1.2 Coincidencia diferida; por ejemplo: libros, bibliotecas, fax, lugares web, bases de datos distribuidas, sistemas de recuperación de información, web semántica, tesauros, ontologías informáticas. 2 Vínculos de compromiso: solidaridad, reciprocidad, colaboración, estructuración concertada de funciones, misión compartida y explícita, transparencia, etc. 3 Vínculos afectivos: intereses comunes, problemas afines, visión compartida, coincidencia de significados, etc. La incorporación del elemento técnico. . El Sistema de Reflexión y Seguimiento Popular es un sistema flexible que supone que los elementos técnicos instrumentales y los recursos informáticos se incorporen en la dinámica fundamental de Reflexión, sólo en la medida en la que estos elementos estén disponibles en el colectivo que busca concretar el sistema, o en el momento en que dicho colectivo prevea que es necesario hacerlo. Procesos de formación y socialización del conocimiento entran luego en la dinámica madurando y potenciando la misma en un sentido endógeno. La participación corresponsable. . Con el propósito de visualizar los grados de corresponsabilidad que deben servir de base para el Sistema de Reflexión y Seguimiento Popular, y apropiarse del espíritu de compromiso que debe existir en este contexto de articulación, es necesario rescatar las buenas prácticas para la reflexión en la participación. Para derrotar la exclusión en todos los momentos de la toma de decisiones sobre asuntos de interés público, se debe tener en mente el principio de participación protagónica. Para derrocar la percepción de las comunidades de un Estado Paternalista que todo lo resuelve y la comunidad solo espera recibir, se debe fomentar el trabajo en conjunto y el sentido de congestión y autogestión. Para elevar la autoestima y la motivación popular, estimulando las iniciativas creativas de las comunidades, se debe aprender a escuchar a las comunidades. Bajo el principio de inclusión, se debe atraer a todos los actores para defender los intereses públicos de la comunidades. Se debe fomentar el sentido de cooperación comunitaria y el surgimiento de lideres naturales desde las bases de las comunidades. Se debe procurar elaborar en conjunto un proyecto de vida común orientado a compilar las metas totales de las comunidades. Se debe distribuir actividades y tareas entre los actores de las comunidades, y organizar el proceso de seguimiento. Se debe hacer búsquedas en consenso de alternativas pertinentes para solución de problemas. El proceso de toma de decisiones debe tomar en cuenta el contexto y las matrices culturales propias del espacio donde se llevará a cabo el accionar de las decisiones. Se debe procurar que el proceso de toma de decisiones se mueva en un plano jurídico estable. Se debe simplificar en todo momento procesos, desconcentrar acciones, achatar niveles jerárquicos, para evitar desmotivación popular. Se debe promover la formulación de indicadores medibles para evaluar el plan de trabajo y planificar el seguimiento de ejecución de tareas, en períodos apropiados. Se debe fomentar que los funcionarios públicos solo tengan derecho a voz, y no a votos, en lo procesos de toma de decisiones comunitarios. Se debe fomentar que las instituciones del Estado rindan cuentas públicas periódicamente a las comunidades. Se debe poder hacer experimentaciones pilotos que sirvan de retroalimentación y rectificación a tiempo de las fallas, y además, de vitrina a los demás entes comunitarios. III.Medios para la participación protagónica en la Gestión de Gobierno . Tal y como se expresa en la CRBV, el proceso de rescate del bien público se manifiesta en la búsqueda por constituir una sociedad democrática, participativa y protagónica, multiétnica y pluricultural. Para ello se han venido formalizando modos de organización y participación comunitaria cuya principal expresión son, hasta ahora, los consejos comunales. . Se hace evidente, dado lo anterior, que las organizaciones públicas deben refundarse en función de fortalecer el poder popular hacia el empoderamiento del pueblo en los consejos comunales. Se trata de un modo de organización pública cuyo direccionamiento político sea para, y por, el mandato del pueblo. En este sentido, se procura diseñar un modo de organización pública que genere y haga uso de tecnologías libres apropiadas, para focalizar la gestión pública dirigida al fortalecimiento del ejercicio del poder popular como poder constituyente de la República en refundación. Objetivo . Organización pública enfocada al fortalecimiento del poder popular, a través del uso de la tecnología libre, para focalizar la gestión pública desde las comunidades con el fin de empoderar al pueblo y ejercer el poder popular. Procesos y Componentes Promover espacios de articulación local, regional y nacional, con la participación protagónica de las comunidades, en función del despliegue de la cultura, para la construcción de proyectos locales, regionales y nacionales. Emprender proyectos para el rescate y la sistematización de expresiones que promuevan el rescate de las culturas locales en función de la multiculturalidad y la pluralidad étnica expresada en la CRBV. Promover espacios en los que las comunidades puedan visualizar su futuro deseado, su situación actual y los medios necesarios para llegar de la situación actual a la deseada. . Como puede verse en la figura 1, la Organización Pública dirigida al fortalecimiento del ejercicio del Poder Popular procura la coordinación y articulación entre el Poder Constituido y el Poder Constituyente. Se trata de construir una forma de organización flexible15 para el poder constituido (la figura 1 muestra una de esas posibles formas), de tal manera que las organizaciones sociales (por ejemplo, los Consejos Comunales) puedan comunicarse y articularse con ella y entre ellos. A partir de tal articulación, las organizaciones sociales podrán participar en la planificación, la ejecución y el control de los proyectos que se promuevan desde el poder constituido. Tal participación podrá articularse alrededor de una Sala de Reflexión y Seguimiento Popular, en la que se definirán los diversos planes y proyectos a desarrollar a nivel de comunidad, parroquia, municipio, estado, región y nación. El Servidor Público de este tipo de organización no deberá ubicarse en un escritorio dentro de un edificio. Por el contrario, deberá enfocarse principalmente al trabajo y la articulación con las comunidades, desde las comunidades. La articulación, como ya lo dijimos, se llevará a cabo a través de la Sala de Reflexión y Seguimiento Popular, mientras que la coordinación de acciones concretas se llevará a cabo a través de la Sala de Articulación. Esta última sala es la encargada de llevar a cabo las tareas de administración de las operaciones a través de las unidades de ejecución. Por último, es importante recordar que éstas unidades de ejecución pueden ser cooperativas, consejos comunales, micro-pequeñas y medianas empresas, u otras que puedan aparecer como pertinentes para cada caso particular. III.IV. Sistema de relaciones Heterárquicas Sociales (SHS) . Los espacios para las relaciones heterárquicas sociales se constituyen como una propuesta que viabilizará la concreción de una dinámica social conducida bajo una actitud cooperativista, con espíritu colaborador, dando así sentido al trabajo en conjunto, todo esto con la finalidad de impulsar de forma coordinada una transformación social pertinente para el proyecto nacional Simón Bolívar. Esta propuesta tiene como fin primordial posibilitar la transformación de los modos de relaciones sociales, donde se reflejen relaciones heterárquicas transparentes entre los actores inmersos en una dinámica social productiva, política o cultural. Estos espacios representan una herramienta política para la socialización del conocimiento como bien público, apuntando así al cambio de actitud individualista por el del trabajo colaborativo, solidario, cooperativista y cogestionado. Por ejemplo, el desarrollo de un Sistema Heterárquico Socioproductivo Nacional, adecuado a las necesidades reales de la población, tributa al fortalecimiento de las relaciones sociales heterárquicas en la medida en que incide sobre la infraestructura de producción, distribución y consumo de bienes, y por tanto está relacionado con el bienestar general de la población. Aún más, la perspectiva de bienestar colectivo sobre el sistema de producción ataca directamente el sistema de relaciones sociales actual (jerárquicas), fundamentadas en la división del trabajo y en el acceso de los distintos estratos de la población de forma diferenciada a los bienes materiales y culturales de la sociedad. El Sistema Heterárquico sirve a la percepción de que la actividad productiva es un hecho eminentemente sociocultural y que, por tanto, contribuye con el desarrollo endógeno de la sociedad socialista. Objetivos . La propuesta de espacios para las relaciones heterárquicas sociales, apunta a contribuir en la construcción de un Sistema Social Nacional como instrumento para la síntesis de una conciencia colectiva y para la satisfacción de las necesidades sociales, con miras al desarrollo integral de la sociedad venezolana. Con ello perseguimos: Posibilitar una transformación social pertinente, apuntando a contrarrestar la conducta individualista y la formación de islas de conocimiento y el ambiente de competencia que impera actualmente en las relaciones sociales. Promover relaciones heterárquicas y transparentes entre los actores inmersos en cualquier dinámica socioproductiva, sociopolítica y sociocultural. Cultivar las virtudes de la Crítica, el Trabajo Colaborativo, la Solidaridad y la búsqueda de la Excelencia Posibilitar el surgimiento y la consolidación de nuevas formas de auto-organización social. Procesos componentes . Dentro de los espacios para las relaciones heterárquicas sociales se han identificado Procesos Organizacionales, Procesos de Cultivo Sociocultural, y elementos que constituyen la Plataforma libre para la promoción de las interacciones humanas (ver figura 2). Los Procesos Organizacionales indican aquellas formas de organización e interacción que existen o surgen dentro de la dinámica social, plasmando los medios formales de articulación y acción. Los Procesos de Cultivo Sociocultural indican aquellas formas culturales que son propias de la comunidad y que brindan sentido al quehacer comunitario en el cultivo, creación, distribución y apropiación del conocimiento como bien público. La Plataforma Libre para la Promoción de las Interacciones Humanas se constituye como la infra e info estructura tecnológica que promocionará y facilitará el surgimiento de nuevas formas de interrelación social. Se aspira que de la sinergia de esos procesos se generen prácticas que procuren la excelencia. Para desplegar la promoción de las interacciones sociales hemos visualizado, inicialmente, los siguiente componentes, los cuales serán descritos a continuación (ver Figura 3): El Sistema de Gestión de Actores – SGA representa al conjunto de medios y mecanismos que permiten manejar información del perfil que describe al actor y su participación en una dinámica particular. El SGA se constituye dentro de estos espacios de relaciones como medio que permite la reunión de los actores identificados dentro de una dinámica social particular. El SGA debe proveer los mecanismos (herramientas), procesos (métodos) y condiciones que permitan concentrar en un espacio a los actores involucrados en un dinámica particular. En el SGA un actor particular podrá registrar su perfil, que se irá modificando y madurando dependiendo de la dinámica del actor en las relaciones en las que participe. El SGA debe ser flexible, es decir, se debe poder crear una instancia base para cada ámbito político, productivo o cultural donde estos espacios de relaciones heterárquicas sociales sean recreados. Es por ello que es importante identificar los aspectos, cualidades y características comunes que describen el perfil de un actor en toda relación social bien sea de carácter político, productivo o cultural. Otro proceso identificado dentro de los espacios de relaciones es la valoración de las relaciones sociales. Es por ello que el Sistema de Valoración de Actores - SVA representa un conjunto de mecanismos que permiten evaluar el comportamiento de los actores inmersos en la dinámica social, en base a las relaciones que surgen entre ellos. En el conjunto de relaciones que emergen entre estos actores es clave poder cultivar las virtudes de la crítica, el trabajo colaborativo, la solidaridad y la búsqueda de la excelencia. El SVA permitirá observar el grado de transformación que se está dando en la relaciones sociales productivas, políticas o culturales. La valoración que se da entre todos los actores, en base a las relaciones directas que surgen entre ellos, evalúan las actitudes que estos manifiesten en las mismas. El SVA tiene como propósito fundamental dinamizar la participación de los actores, así como también potenciar la emergencia de los actores, orientados al cultivo del bien público, por el hecho de que la valoración se lleva a cabo por todos y cada uno de los actores en base a sus experiencias en la dinámica social, utilizando como criterio la pertinencia cultural. El perfil que va emergiendo de cada actor no depende de un único actor regulador/intermediario, que evalúe al resto de los actores inmersos en la dinámica. Por el contrario, el perfil y surgimiento de cada actor depende de su accionar y de los valores que manifieste en éste. El SVA potenciará el establecimiento de lazos de confianza, ya que la valoración que posee cada actor representa sus actitudes, valores y principios, impulsando a otros actores a establecer algún tipo de relación social con él. De esta manera, el SVA se constituye como medio para posibilitar nuevas formas de organización. Al potenciar los lazos de confianza entre los actores es muy probable que surjan la articulación y vinculación entre actores dando pie al surgimiento de nuevas formas de auto-organización social y potencialmente cultivadoras de la cultura. El Sistema de Gestión de Interrelaciones – SGI representa al conjunto de mecanismos que permiten caracterizar a las relaciones/vínculos/interacciones que se dan entre los actores participantes en el sistema heterárquico. Este sistema caracteriza dichas relaciones en función de las dinámicas, virtudes, compromisos, formas, entre otros, que se dan en dichas relaciones. Además, permite llevar un historial que incluye a las relaciones que van emergiendo, como también a las que han desaparecido, para realizar con ellas tareas aprender. Otro proceso importante en la dinámica social es la construcción de una Base de Conocimiento. La Base de Conocimiento representa el conjunto de experiencias y aprendizajes que los actores han tenido sobre hechos previos, prácticas e información obtenida a través de diversas fuentes como discusiones, conversaciones, procesos de observación, entre otros. Esta base de conocimiento en cierta medida está constituida por conocimiento no estructurado y conocimiento estructurado. El conocimiento no estructurado es todo aquel conocimiento representado por las experiencias, los puntos de vista, las necesidades, las opiniones que los actores poseen sobre un tema específico. El conocimiento estructurado constituye todo aquel conocimiento que se organiza y se presenta en un formato explicito fácilmente apropiable por otros actores. El conocimiento estructurado se puede basar en la información que recoge el conocimiento no estructurado. Las ideas fundamentales de crear una base de conocimiento son: Potenciar el trabajo participativo, colaborativo y de construcción colectiva del conocimiento. Potenciar y posibilitar el aprendizaje colectivo. La base de conocimiento se constituye como un espacio de interacción entre actores, ya que la dinámica de compartir con otros sus experiencias y necesidades facilitarán esta interacción, potenciando la comunicación, la colaboración e intercambio de conocimiento. Posibilitar la apropiación y creación de conocimiento. . Unido a la construcción de la base de conocimiento es importante que existan Espacios de Discusión (dinámica de reflexión). Estos espacios se constituyen como un conjunto de mecanismos y procesos que van a permitir a los actores compartir ideas, puntos de vista, así como opiniones acerca de nuevas temáticas no asociadas y no representadas en la base de conocimiento. Estos espacios de discusión deben permitir a los actores discutir y opinar sobre cualquier tema, desde lineamientos bases para la dinámica de los espacios para las relaciones heterárquicas sociales hasta nuevos temas, comportamientos, mecanismos, que puedan emerger de la interacción de los actores; siempre orientados al cuidado del bien público. De estas discusiones pueden surgir, por un lado conocimiento estructurado que va a formar parte de la base de conocimiento ya construida por los actores que participan en la dinámica, y por otro, lineamientos, normas, acuerdos, políticas que rijan los modos de comportamiento, organización, participación de los actores en la relaciones sociales. Los Procesos de Socialización deben representar procesos fundamentales dentro de las dinámicas sociales estudiadas. Estos procesos de socialización están constituidos por medios y espacios que permitan la socialización del conocimiento entorno a las relaciones heterárquicas sociales. Un Sistema de Gestión de Relaciones (SGR) desde el cual se manejará todo lo relativo a las relaciones e interacciones de los participantes será el espacio en el que se promoverá los procesos de socialización propios del SHS. El conocimiento a ser socializado está representado por las bases ideológicas y la filosofía que promueven los espacios para las relaciones heterárquicas sociales, así como también el conocimiento particular que se genera en cada ámbito de las relaciones sociopolíticas, socioproductivas y socioculturales. Los procesos de socialización posibilitarán la apropiación del conocimiento por parte de actores inmersos en las relaciones heterárquicas sociales. En la reunión entre los Procesos de Socialización en las dinámicas de reflexión dos asuntos deben imbricar el quehacer: el cultivo sociocultural y el despliegue de prácticas organizacionales anti-burocráticas. El cultivo sociocultural es un modo de quehacer que pretende enfrentarse al instrumentalismo dominante en la actualidad y a la enajenación del bien público que ha sufrido Venezuela. El quehacer que pretende cultivar la cultura es en extremo complejo y no puede circunscribirse a un quehacer particular. El cultivo sociocultural debe penetrar e impregnar todo el hacer humano. En la particularidad de nuestra contemporaneidad el cultivo sociocultural tiene una peculiar característica. No se trata, como lo fuese en una cultura en buen estado, de actuar en correspondencia a la cultura en función de mejorarla. Se trata, de actuar en función, más bien, de recuperarla. Utilizando una metáfora agrícola, no se trata de abonar el suelo para la siembra. Se trata, de actuar en función de un proceso de recuperación de suelo. Por ello, creemos que es pertinente promover procesos de recuperación de historias locales que den cuenta de cómo hemos llegado a ser lo que somos. El recuento de lo que somos, busca promover un proceso de apropiación de nuestra historia que brinde sentido al quehacer cotidiano. De esta manera, se busca promover una acción con sentido que trascienda al instrumentalismo y en el que el bien público de la venezolanidad sea fuente de sentido. Por su parte, el despliegue de prácticas organizacionales anti-burocráticas pretende enfrentarse a la racionalidad dominante caracterizada por el reinante instrumentalismo y la jerarquía. Ante el modo burocrático dominante en nuestras organizaciones proponemos, siguiendo las ideas de Ramsés Fuenmayor, una propuesta de “práctica” en el sentido de Alasdair MacIntyre: “[Una práctica es] una forma coherente y compleja de actividad humana cooperativa, socialmente establecida, mediante la cual se realizan bienes internos a esa forma de actividad, en la medida en que se intenta alcanzar esos patrones de excelencia que son apropiados para —y que parcialmente definen a— esa forma de actividad, con el resultado de que los poderes humanos para alcanzar excelencia y las concepciones de los fines y bienes envueltos son sistemáticamente mejorados” 16 . Una práctica así concebida es un modo cooperativo de acción en función de la excelencia alrededor del cultivo de las virtudes. Las virtudes son las cualidades que deben cultivarse con miras al mejoramiento progresivo del practicar de la práctica en la realización de sus bienes internos. La buena apreciación de los bienes internos de una práctica solo podrá ser bien concebida por los practicantes más virtuosos de la misma. Por ejemplo, una buena ejecución del violín podrá ser bien apreciada por los virtuosos practicantes del violín. De aquí que, la autoridad no viene dada por el escritorio del burócrata sino por el virtuosismo en la práctica. Ahora bien, una práctica debe estar “socialmente establecida”. Por esta razón, en una sociedad de prácticas, los bienes internos de la práctica deben ser también bienes sociales, es decir, bienes públicos. En otras palabras, no tendría sentido que en una práctica un virtuoso sea un practicante del mal. De aquí que, la práctica de la práctica se convierte así en un progresivo cultivo del bien público. El buen ejecutor del violín, es en ello también, un buen ciudadano y viceversa, el buen ejecutor del violín mostrará su practicar excelso en su buena práctica ciudadana. De esta manera puede entreverse la dinámica relación entre las tres facetas del SHS. El cultivo sociocultural promueve el cuento que brinda sentido hacia un quehacer organizacional que procura ir realizando el bien público. Para ello, los procesos componentes de un sistema automatizado procuran coadyuvar como espacios de interacción entre los diversos actores. IV.Propuestas Piloto . Las Propuestas Piloto que aquí se avanza procura llevar a la acción los proyectos arriba presentados. La Sala de Reflexión y Seguimiento Popular se procura implementar en algunas instancias de comunas de Consejos Comunales. El Sistema de Relaciones Heterárquicas se procura implementar en varios espacios, uno de los cuales, que es el que se muestra en esta propuesta es el del Sistema Administrativo Integrado para Entes Descentralizados. Finalmente se presenta una propuesta para la implantación de la Organización Pública orientada al Fortalecimiento del Poder Popular en la instancia de las Corporaciones Regionales de Desarrollo. IV.I. Espacios de Poder Popular . El fortalecimiento del Poder Popular contribuye con la construcción de una sociedad de sujetos conscientes que toman parte activa en los diversos procesos que componen la vida en colectivo. Se orienta directamente a la transformación de la relación entre gobernantes y gobernados, a la propiedad de los instrumentos de decisión política y de administración pública, a la integración de escenarios a veces contrapuestos (burocracia y comunidad) y, en definitiva, a la construcción de una sociedad que se autogobierna en función del bienestar social y que se sirve fácilmente de los recursos del estado para lograr este cometido. La comunidad popular, entendida como un conjunto humano que tiene intereses y necesidades comunes, que se relaciona entre sí y que comparte un espacio geográfico, posee características distintas a las organizaciones tradicionales y, por tanto, merece ser tratada en su particularidad. En una comunidad, donde no siempre contamos con vínculos “formales” (dependencia salarial, jerarquía) sino “informales” (vecindad, amistad, consanguinidad), es preciso realizar un amplio esfuerzo de activación, organización y movilización del potencial existente para el cumplimiento de actividades que conduzcan al bienestar colectivo. Probablemente la dinámica por excelencia de la acción comunitaria es aquella que se encuentra constituida por diversas herramientas de trabajo participativo, en las cuales los “problemas” se “construyen” (se conceptualizan) con presencia del colectivo, al igual que las vías de acción. De este modo se construye una cultura de participación, sentimiento de pertenencia con la comunidad, así como también compromiso y apoyo a las iniciativas generadas en las distintas dinámicas. Algunas actividades que se incluyen en esta categoría son: 1.El diagnóstico participativo. 2.El presupuesto participativo. 3.La realización de Proyectos Comunitarios, el Plan de Desarrollo Comunal y los Planes de Acción Comunitarios. 4.La investigación-acción participativa. . De igual manera, la creación y puesta en marcha de organizaciones como los Consejos Comunales (con sus distintos comités de trabajo), las Mesas Técnicas de Agua y los Comité de Tierra Urbana requieren de diversas actividades arraigadas en la perspectiva de acción participativa. La Comunidad Popular Organizada se constituye, de cara a la construcción del Socialismo del Siglo XXI, en la célula fundamental de auto-organización y auto-gobierno, comprendido éste último como la participación del colectivo, de una manera organizada y consciente, en procesos fundamentales para su desarrollo, no solamente en el ámbito político, sino también en lo económico, social, cultural y ambiental. La creación de una Sala de Reflexión Situacional Comunitaria es importante a su vez para la integración comunitaria, condición primera para el logro de una mayor independencia basada en el trabajo colectivo. Podemos decir que la función de una Sala de Reflexión y Seguimiento Popular consiste en generar entendimiento entre actores sociales y facilitar la comprensión del entorno en el que tienen lugar las relaciones entre estos mismos actores. Con este propósito, distinguimos cinco momentos básicos, que deben orientarse por el criterio del cuidado de la cultura hacia la búsqueda del socialismo: 1.Observación: se trata del momento de recolección de información en la comunidad. Tiene como prerrequisito que se haya logrado cohesionar un equipo amplio de personas comprometidas y colaboradores para la búsqueda de la información, una metodología para la recolección, y un consenso general sobre qué tipo de información se está buscando y cómo será utilizada. 2.Análisis: en este momento se organiza la información obtenida (datos crudos) y se examina para su validación. Luego se ordena de tal manera que comienza a mostrar los aspectos generales de problema que se investiga. 3.Reflexión: la información estructurada se convierte en insumo para diversas actividades de discusión colectiva. Aquí las personas involucradas en la Sala, y en la comunidad, se darán a la tarea de buscar el significado de la situación que se vislumbra luego de la búsqueda y el análisis de la información, siempre desde la perspectiva del interés colectivo y en el contexto de los temas que la misma comunidad considera importante para su desarrollo. 4.Socialización: La información recolectada y contextualizada se divulga en la comunidad a través de medios impresos y asambleas. El momento de socialización y el momento de reflexión se encuentran íntimamente ligados, de tal manera que los elementos aportados en la primera reflexión se nutren significativamente de las perspectivas que aporta el colectivo en discusión abierta. En este momento se busca también sentar las bases para la elaboración de una estrategia de acción. 5.Decisión: una vez que la comunidad se ha aproximado a la comprensión del problema, se cuenta con elementos suficientes para iniciar la tarea de planificar acciones para su abordaje, a través de actividades como diagnósticos participativos y la elaboración de proyectos comunitarios. La comprensión de la situación dada es lo que genera entendimiento entre los actores sociales, y de allí surge la posibilidad de unificar esfuerzos para la solución de un problema de modo colectivo. . Podemos considerar que estos elementos se encuentran dentro de un plano de conceptualización de la Sala de Reflexión y Seguimiento Popular. Ahora bien, ¿cómo lograremos su despliegue en un plano de acción comunitaria? Las dinámicas participativas nos proporcionan las herramientas que podemos utilizar para convocar a los integrantes de la comunidad y sumar sus esfuerzos en la búsqueda de objetivos comunes. Para iniciar este tipo de dinámica es necesario, ante todo, contar con: 1.Un equipo de promotores: personas comprometidas que se encargarán de llevar a buen término la actividad, lo cual no implica que se adueñarán del proceso. 2.Infraestructura y recursos necesarios: un lugar de reunión ubicado en la propia comunidad, materiales de trabajo como papelería, etc. 3.Posibilidad de establecer vínculos de comunicación y de acción: deseos de integrar la perspectiva y lenguaje común basados en los intereses de la comunidad. 4.Respeto a las dinámicas comunitarias y participativas: se debe tener ante todo respeto por los elementos que caracterizan a la comunidad, deseos de convocar a sus habitantes a participar y observancia fiel de los elementos que es necesario cumplir para que el proceso que se realiza sea verdaderamente participativo. 5.Elementos de organización: es necesario poder cumplir con algunos aspectos básicos de organización (en las asambleas, por ejemplo), con el propósito de sacar el máximo provecho de la disposición de los habitantes de la comunidad, así como para prevenir su agotamiento. . Finalmente, las dinámicas participativas se encuentran integradas de diversos elementos, los cuales no es posible desarrollar aquí. Basta decir, por ahora, que se trata de técnicas que permiten: 1.Estructurar la información de modo colectivo. 2.Caracterizar la realidad geográfica y demográfica de la comunidad. 3.Realizar un inventario de los recursos disponibles (internos y externos) y del potencial de la comunidad. 4.Elaborar diagnósticos colectivos, en los cuales también se toma conciencia de la realidad comunitaria. 5.Establecer planes y procesos de acción comunitarios juntos con herramientas para el control y la planificación de proyectos con el apoyo y la participación de los miembros de la propia comunidad. 6.Crear formas de apoyo a la organización comunitaria así como nuevos vínculos de comunicación. 7.Involucrar a distintos actores presentes en el medio (poder constituido, instituciones, otras comunidades, etc.) IV.Relaciones Socioproductivas: caso SAID . En base a las ideas que plantea la consolidación de los Espacios para Relaciones Heterárquicas Sociales se describe la dinámica que surge entre los actores identificados en el caso del proyecto institucional SAID -Sistema Administrativo Integrado para entes Descentralizados-. Los procesos socioproductivos identificados en relación a esta dinámica están vinculados a aquellos espacios donde los actores directamente involucrados con el uso y desarrollo del SAID puedan conducir sus actividades. El SAID es un sistema de control administrativo desarrollado integramente bajo la filosofía del Software Libre. En este momento la dinámica procura fortalecer espacios de transferencia que posibiliten que Cooperativas de Desarrollo de Software puedan apropiarse del sistema de tal suerte que puedan apoyar en su desarrollo y puedan brindar soporte técnico cuando sea necesario. Algunas de las características fundamentales del SHS alrededor de la instancia SAID son las siguientes: Modelo de desarrollo colaborativo: Dentro de las relaciones que se crean entre CENDITEL y actores externos surgen políticas, mecanismos, acuerdos, normas que potencien el desarrollo colaborativo de software y permitan que funcionalidades del SAID sean desarrolladas por actores externos a CENDITEL. Servicios contractuales: Este tipo de relaciones se estable entre actores externos a CENDITEL. La dinámica de estas relaciones está condicionada a las necesidades que tienen estos actores de cubrir requerimientos, no delimitados únicamente a soporte y/o capacitación entorno al SAID, sino también, a requerimientos en el ámbito de las tecnológicas libres. Base de Conocimiento: construida por medio de la construcción de bases de necesidades y bases de experiencias en las que se resguardan las experiencias que los actores han tenido con el producto. Es claro que dentro de toda la actividad que surge hay un continuo intercambio de conocimiento que debe ser promovido a través de mecanismos de socialización y promoción del conocimiento los cuales permiten que la base de conocimiento que se genera de las actividades socioproductivas de cada uno de los actores sirva de apoyo a las actividades de otros, potenciando así, el valor del conocimiento libre. Estos mecanismos de promoción de conocimiento están representados por el mapa de conocimiento y la base de experiencias. Mecanismo de gestión de actores permite crear un espacio donde convergen un sin número de actores con la finalidad de poder compartir con otros sus aptitudes en el ámbito de las tecnologías libres. Estos mecanismos de gestión facilitan la posibilidad de definir perfiles de acuerdo a las aptitudes que cada uno identifique. Bajo este concepto, no se debe concebir la idea de un catálogo estático de prestadores de servicios, la gestión de actores debe estar concebida de forma tal que se dé dinamismo a las relaciones que surgen entre ellos. La motivación que brindan estos mecanismos de gestión está representada por el hecho de poder establecer vínculos con otros en base la satisfacción de necesidades que se presenten en este ámbito. Mecanismos de valoración de actores, representan de igual manera mecanismos dinamizadores, que permiten evaluar el comportamiento de los actores en base a las relaciones que surjan entre ellos. Estos mecanismos de valoración permiten potenciar lazos de confianza y dan una visión del comportamiento de otros actores. La valoración que se da a un actor es, en cierta medida, símbolo de la experiencia y la confianza que genera este actor, y representa una estimación de cómo es su accionar dentro del sistema. Estos mecanismos de valoración permiten que se evalúen tanto el accionar de un actor como sus aptitudes. . Todos los mecanismos presentados antes (base de conocimiento, SGA, SVA, etc.) conformaran el sistema de Reflexión para el SAID, el cual tendrá una connotación distribuida y virtual, para que toda la comunidad que se ha generado alrededor del SAID participe y socialice la información inmersa en ella. Además, instituciones como CENDITEL deberán ajustar su modelo de organización (pensando en organizaciones flexibles) para que los entes externos a ellas participen en los procesos de construcción colectiva del SAID. IV.Corporación de Desarrollo Regional . La planificación de la sociedad democrática, participativa y protagónica, pluricultural y multiétnica debe hacerse con y para el fortalecimiento del Poder Popular. Por lo tanto se entiende que la planificación del desarrollo debe hacerse con el pueblo mediante la participación de los consejos comunales como protagonistas. En el proyecto político que se expresa en la CRBV encontramos alusión a una noción distinta de desarrollo en la que se procura el desarrollo humano integral. Cuando indagamos sobre esta noción de “humano integral” vemos que se establece que: a) la creación cultural es libre (Art. 98), b) las culturas populares son constitutivas de la venezolanidad (Art. 100), y, c) la cultura es un bien irrenunciable del pueblo (Art. 99). En consecuencia, la educación y el trabajo deben constituirse y ser constitutivas a partir de las culturas conformantes de la venezolanidad17. Reuniendo lo que hemos venido presentando se hace evidente que una Organización promotora del Desarrollo Regional debe incentivar un modo de planificación del desarrollo que sirva de espacio impulsor de la democracia participativa y protagónica en el despliegue de las culturas conformantes de nuestra venezolanidad. Los objetivos de la Corporación Regional para el Fortalecimiento del Poder Popular son los siguientes: Promover espacios para el rescate crítico de los quehaceres propios de las culturas locales que conforman la venezolanidad. Promover espacios para la planificación participativa en función del desarrollo endógeno sostenido desde las culturas locales a partir de las problemáticas percibidas y estructuradas desde las comunidades. Promover espacios para la articulación entre los proyectos locales, regionales y nacionales. . Finalmente, la implantación de este modelo otranizacional ameritará de: 1.Sala de Supervisión Popular: Espacio de supervisión en la que el Poder Constituido y el Poder Constituyente se encuentran en la detección, reflexión y estructuración de los problemas y en la que planifican, ejecutan y controlan los proyectos. 2.Sala de Gestión: Espacio dirigido a la gestión de los recursos en función de alcanzar los objetivos que han sido definidos con las comunidades a través de los diversos mecanismos de la Sala de Supervisión Popular. V. Aspectos de Concreción V.I Impacto . Tradicionalmente, al diseñar organizaciones, se “opta automáticamente” por implantar entidades estructuradas -a priori- por “expertos”; caracterizadas por su rigidez intrínseca y su alta tendencia al burocratismo. Este enfoque asume una postura manipuladora de la comunidad; la cual, resulta regulada externamente; vale decir: considerada como un objeto. Esencialmente, un sujeto (equipo de peritos) opera sobre lo que ellos consideran como una “masa social” (objeto) de estudio neutral (objetivo), sin detenerse a considerar la posibilidad de algún enfoque alternativo. Los proyectos piloto planteados en esta propuesta constituyen esbozos iniciales de autocreación organizativa, caracterizada por su autogestión y autoorganización por parte de las comunidades protagonistas. Se contempla el perfeccionamiento continuo y adaptabilidad dinámica a su ambiente, lo cual imprime en dichas “autoorganizaciones” la posibilidad de percibir, responder y captar recursos de su entorno, de una manera autónoma. Este enfoque es diametralmente opuesto a la concepción normal de la burocracia por lo que hace patente la “no neutralidad” del Desarrollo Organizacional, visto como una tecnología social. Se procura que los miembros de la organización sean protagonistas de la práctica que dejan de ser objetos y se constituyen en sujetos transformadores en su interrelación mutua y transparente hacia estadios de mayor excelencia y virtuosismo. Surge así, de la misma dinámica social el empoderamiento (sustancialmente ligado al conocimiento libre) de las comunidades en pos del proyecto compartido de refundación nacional. En los casos concretos que nos ocupan, podemos esperar el surgimiento espontáneo de escenarios con características como las siguientes: Instauración de espacios de revelación de circunstancias sociales y comunicación transparente entre múltiples actores, promoviéndose y facilitándose el encuentro entre individuos, comunidades e instituciones; con aspiraciones y necesidades afines o complementarias. Organizaciones comunitarias formadas para la organización y sensibilizadas para la participación y colaboración sinérgica con las instituciones y con otras comunidades. Comunidades de productores sensibilizadas acerca de un Nuevo Modelo Socioproductivo. La formación de la Conciencia Ciudadana a través de la socialización del conocimiento libre estructurado de la problemática social. Aliento del ánimo colectivo sobre las perspectivas de empoderamiento comunal, en razón de las experiencias exitosas de estos proyectos. La participación corresponsable en el diagnóstico y gestión del entendimiento de la problemática social. Funcionarios administrativos y Representantes electos, sensibilizados sobre la urgencia de viabilizar el Poder Popular -genuino-, como núcleo esencial para la gobernabilidad regional y nacional. Posibilidad de las comunidades de influir sobre la planificación de políticas estratégicas de gobierno. Seguimiento de la Gestión de Gobierno y la formación de un sentido maduro de Contraloría Social. . Estos rasgos esperables son necesarios para el cultivo de valores socio culturales esenciales, y desencadenantes del florecimiento espontáneo (emergencia) de muchos otros valores y principios, todos propios de una cultura en buen estado, autogenerada. V.II. Viabilidad El aspecto político . Por un lado, el proyecto es altamente viable debido a la voluntad y direccionalidad política del proceso revolucionario y la creación de espacios tales como los consejos comunales y los consejos locales y estatales de planificación pública. Resulta muy importante destacar la elevada participación que ha venido caracterizando el proceso revolucionario de la Venezuela de comienzos del Siglo XXI. Sin embargo, es importante recordar que nuestro pueblo sufre de la enfermedad del empobrecimiento cultural en que nos encontramos actualmente y al nos referimos anteriormente. Como consecuencia de ello, existe también un alto grado de apatía en lo referente al ejercicio del protagonismo democrático. Esta apatía es alimentada por el monstruoso poder de la antidemocracia que bombardea desde espacios tales como los medios de comunicación promoviendo la dejadez, la inamovilidad, la inacción, la indiferencia y hasta la afasia. Asimismo, es importante resaltar la previsible oposición al cambio cultural que vendría desde el burocratismo propio que aqueja a las organizaciones gubernamentales. El aspecto tecnológico . Nuestra propuesta dispondría, en esencia, de la posibilidad de potenciar dinámicas totalmente diferentes con características emergentes y auto reguladoras de sí mismas por medio de procesos sociales que se desarrollan en los colectivos. Nuestra propuesta busca su implementación básica, fundamentalmente, mediante la creación y utilización de: Tecnologías blandas: Dinámicas organizativas de participación -para la estructuración y socialización de conocimiento-. Trabajo dentro de las comunidades para el cultivo de formas de autogeneración. Dinámicas de comunicación -para la interacción con otros actores en red-. Establecimiento de vías de enlace entre los centros de decisión institucionales y comunitarios. Recursos de administración y gestión y elementos de conectividad básicos: Agendas, directorios, archivos, correo y encomiendas, telefonía, correo electrónico -si está disponible-. Planes de Sensibilización: Sensibilizar al ciudadano-servidor público y al ciudadano-vecino para rol de participación inherente a la propuesta, tanto en las comunidades como en los organismos públicos. Existencia de comunidades con un nivel mínimo de organización para potenciar su participación en las dinámicas propuestas. . Elementos de socialización y construcción de conocimiento libre estructurado (aportes institucionales en cada dinámica): Computador portátil. Videobeam y pantalla de proyección (el número de los mismos dependerá del número de comunidades y el número de funcionarios a abordar las experiencias pilotos). Elementos logísticos: Espacios para ensayar estás dinámicas en salas de reunión. Transporte de personal y equipos institucionales. Inventario de base de Organizaciones Socioproductivas establecidas que pueden participar activamente en el desarrollo de las dinámicas propuestas. Posibilidad de articular cambios en los esquemas de desempeño de la Administración Pública para convertir en prioridad el trabajo con las comunidades y las Organizaciones Socioproductivas. Inventario de medios para la socialización del conocimiento libre estructurado y de las propuestas resultantes de los procesos de gestión de gobierno corresponsable. . La eventual disponibilidad de tecnologías basadas en Conocimiento Libre facilita la incorporación eventual de recursos informatizados en la dinámicas propuestas, particularmente en el Sistema de Reflexión y Seguimiento Popular y en los Espacios para Relaciones Heterárquicas Sociales. A su vez, los procesos de socialización del conocimiento y de reflexión colectiva inherentes a la propuesta prevén la formación de nuevas potencialidades en los colectivos, para crecer de una forma culturalmente saludable, interconectándose mutuamente para formar una gran red de flujo de conocimiento y posibilidades de gestión pertinente de gobierno. V.III Primeros Pasos . La concreción inicial de la propuesta puede lograrse abordando la consecución de algunos elementos o acciones principales, a saber: 1.El compromiso con actores cívicos e institucionales: entendido como un elemento dinámico que puede incorporarse a la propuesta según emerja la necesidad de un aporte en particular. La naturaleza actual de la dinámica social compleja exige la búsqueda inicial del compromiso de actores en los sectores de alimentación, salud, construcción de soluciones habitacionales, educación y/o acceso a servicios básicos. 2.La incorporación de los actores en un Plan de Sensibilización Social: este elemento prevé la formación de un entendimiento inicial sobre las causas profundas de la dinámica social compleja que experimentamos actualmente en nuestra nación, el conocimiento de la estructura del Estado y del Marco Legislativo que lo norma. 3.Familiarizar a los actores con Herramientas para la Participación corresponsable en procesos de generación, maduración y afinación de propuestas. Esto puede abordarse como parte del Plan de Sensibilización Social. 4.La generación de acuerdos iniciales para la socialización del conocimiento libre estructurado sobre la problemática social. 5.La identificación inicial de los recursos técnicos y tecnológicos de los que dispone el colectivo convocado.